A treinta años de su fundación Estación Central es una comuna segregada: a quienes viven hacia el interior de nuestra comuna, el transporte, la salud y la educación les llega de manera distinta. Tenemos un municipio cerrado a la participación ciudadana, no estamos siendo nosotros quienes decidimos cómo queremos nuestra comuna. Se ha querido cambiar el rostro de Estación Central pero para mal: la especulación de las inmobiliarias ha puesto su foco en la comuna y las administraciones anteriores simplemente le han abierto las puertas de par en par, sin ningún tipo de regulación que asegure que esto no nos afecte.
Hoy tenemos la oportunidad dela comuna que queremos y nos merecemos, abrazando su historia y recuperando nuestra cultura. Estación Central puede ser distinto, queda mucho por hacer: hagámoslo.
Un municipio para la ciudadanía y la calidad de vida
El año 2011 se promulgó la Ley sobre Participación Ciudadana (Ley 20.500) donde “el Estado reconoce a las personas el derecho de participar en sus políticas, planes, programas y acciones”.
Pero hoy los espacios que existen no son utilizados de manera adecuada para bien de la ciudadanía sino como espacios de propaganda y clientelismo de los partidos políticos.
Proponemos una municipalidad diferente, una municipalidad realmente de las y los vecinos de la comuna. Esto implica desarrollar una ordenanza municipal de participación ciudadana que permita una gestión municipal realmente participativa. Asimismo, se buscará fortalecer las instancias de participación ya existentes, pero mal utilizadas hasta ahora, como el Consejo de Organizaciones de la Sociedad Civil, entregando las herramientas necesarias para que las organizaciones existentes puedan apropiarse de este espacio. Perfeccionaremos los mecanismos de toma de decisiones participativas, considerando dentro de ello el desarrollo de plebiscitos vinculantes.
Una educación que entregue futuro
Esta candidatura manifiesta su compromiso con la educación pública, universal, gratuita y de calidad. Pero la educación hoy en la comuna está lejos de representar estos principios y los esfuerzos del municipio deben estar en contribuir a sacarla de ese lugar.
Para esto se requiere en primer lugar utilizar de manera adecuada los recursos disponibles y usarlos para lo que son creados, no para otros fines. Mejorar pedagógicamente las escuelas, las condiciones laborales de sus profesores y funcionarios y reformar sus edificios para una educación digna son metas básicas. Nuestra comuna es diversa y las escuelas deben ser un motor para la integración social y la superación de las personas.
Salud como derecho para todos y todas
La Salud debe ser considerada un derecho social, gratuito, universal y de calidad. Hoy los servicios de salud de la comuna tienen problemas importantes. Si bien los recursos que llegan del gobierno central son escasos, la gestión de éstos es deficiente y debe ser mejorada. Se debe enfrentar desde el municipio la carencia de medicamentos, la elevada rotación del personal médico y la atención a los usuarios para aportar en mejorar el problema de las colas.
Pero para no llegar a urgencias el municipio debe fortalecer su enfoque en la salud preventiva. Además, está el problema de que hoy sólo se puede acceder a elevados costos de los medicamentos que se recetan producto de su dependencia de grandes cadenas comerciales. Así, deben desarrollarse tanto una farmacia popular, como una óptica popular, que ya han probado su eficacia en otras comunas del país, dando acceso universal y sin discriminación a los habitantes de la comuna a estos productos.
Una comuna inclusiva, con igualdad de derechos y sin discriminaciones
arbitrarias Si el municipio quiere igualdad de derechos debe dar el ejemplo y eliminar la discriminación en las oficinas municipales, como las diferencias salariales. También se deben dar las herramientas necesarias para que las trabajadoras puedan desenvolverse sin trabas en sus respectivos empleos. En esa línea es relevante el desarrollo de políticas que combatan todo tipo de violencia de género, ya sea ayudando a mujeres víctimas de aquella como entregando herramientas que permitan que las mujeres no se encuentren en una situación de dependencia frente a los hombres (violencia económica).
Será fundamental, en esa línea el desarrollo de una política de inclusión e igualdad de derechos, que debe permear el conjunto de las instituciones y políticas municipales, política que debe garantizar la igualdad de derechos entre vecinos y vecinas, trabajadores y estudiantes de la comuna combatiendo todo tipo de discriminación.
Seguridad ciudadana con enfoque prevención y nuestros espacios públicos
Los delitos al interior de Estación Central son un da problema complejo y no se pueden solucionar con medidas que suenan bien pero han fracasado en otros lugares del mundo.
El foco en primer lugar esté en la prevención, por eso debe trabajarse desde las escuelas y liceos desde temprana edad. Además, para enfrentar la delincuencia hay que recuperar los espacios públicos y fortalecer las organizaciones comunitarias. De este modo, reducir la ocurrencia de delitos implica un trabajo conjunto entre las instituciones responsables, el municipio, vecinos y organizaciones sociales, porque espacios públicos sanos y comunidades fuertes alejan al narcotráfico.
Un segundo problema asociado a la ocurrencia de delitos está asociado al consumo y tráfico de drogas en la comuna. En la prevención al consumo de drogas deben concurrir políticas municipales asociadas al ámbito educativo, pero también al ofrecimiento de oportunidades y acceso para el desarrollo de cultura, deporte y utilización de espacios públicos. Cuando la prevención no ha sido efectiva, el Municipio también debe ofrecer posibilidades reales de rehabilitación e inserción laboral.
Transporte inclusivo y eficiente
El transporte no es igual para toda la comuna y los sectores más alejados de las principales vías (Alameda, 5 de Abril, Las Rejas) son los más afectados. Mientras las grandes avenidas tienen elevados flujos de locomoción pública, hacia el interior de la comuna esta escasea y la conectividad -y con ello la calidad de vida- disminuye considerablemente.
Pensar una comuna justa y para todos y todas implica que el derecho a la movilización debe ser garantizado para toda la ciudadanía. De este modo, el municipio debe hacerse cargo de este problema, por un lado, gestionando hacia el gobierno central la mejora en la frecuencia y en los recorridos de micro ya existentes, pero también, por otro lado, ofreciendo a la comunidad oportunidades de movilización alternativas y gratuitas. Para ello debe ofrecer micros vecinales, que realice recorridos gratuitos por las zonas con menor conectividad, durante las horas peak acercando a vecinos y vecinas a los puntos neurálgicos de la comuna. Igual medida debe realizarse para poder acercar a escolares a sus escuelas y a las personas de mayor edad a los consultorios.
Además se deben fomentar medios alternativos de transporte como las bicicletas. Para ello debe desarrollarse infraestructura vial (ciclovías), para que las personas puedan desplazarse por la comuna o para usarlas como acercamiento al metro o Alameda. Para eso son vitales estacionamientos seguros.
Una comuna para todas y todos debe asegurar los medios necesarios para que la ciudadanía pueda desplazarse sin diferencias al interior de ella, como hacia otras partes de la ciudad.
Una comuna que se modernice, pero lo haga de manera planificada: Recuperar espacios públicos y un alto al abuso de las inmobiliarias
Durante las últimas gestiones municipales se ha abierto nuestra comuna a la construcción irracional de edificios. El resultado de esto han sido las enormes torres construidas durante los últimos años a lo largo de los ejes principales de Estación Central. Ante la ausencia de un Plano Regulador Comunal, se ha edificado con normas de construcción que datan de la década del 1930 y que no pone ningún límite a los perjuicios que este tipo de edificación trae a los habitantes de la comuna. Queremos que la comuna se modernice pero con reglas claras y compartidas por todos. Para ello es urgente el desarrollo de un Plano Regulador Comunal, que ponga límite a la especulación inmobiliaria y que piense la comuna que todos y todas queremos.
El desarrollo de la comuna debe sostenerse en el fortalecimiento de los espacios públicos. Generar las condiciones para que puedan ser apropiados por la ciudadanía, no sólo fortalece la vida en comunidad, sino que funciona como principal herramienta para la seguridad pública y el fortalecimiento de la organización social.
Relevando la cultura: nuestra cultura, cultura inclusiva
Estación Central es una comuna con historia, sus barrios están marcados por la tradición ferroviaria, una cultura de trabajadores y trabajadoras, y que sin embargo hoy se encuentra desplazada. Pero la cultura es lo que hacemos nosotros mismos y somos buenos en eso. Entendemos la cultura de este otro modo, como creadora de comunidad y como una herramienta fundamental para construir la vida buena, se debe mirar hacia adentro y rescatar lo que aquí se está haciendo.
De este modo, abogamos por una alcaldía que ofrezca espacios tanto para acceder y para desarrollar cultura, que fortalezca las actividades culturales realizadas en nuestros barrios más allá si son o no parte de los circuitos comerciales, que fomente e incentive la recuperación de los relatos populares del Chile de hoy, haciendo sentido a las personas que hoy habitan Estación Central orgullo por su comuna.
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